Quiero morir cuando decline el día,
en alta mar y con la cara al cielo,
donde parezca sueño la agonía
y el alma un ave que remonta el vuelo.
No escuchar en los últimos instantes,
ya con el cielo y con el mar a solas,
más voces ni plegarias sollozantes
que el majestuoso tumbo de las olas.
Morir cuando la luz triste retira
sus áureas redes de la onda verde,
y ser como ese sol que lento expira;
algo muy luminoso que se pierde.
Morir, y joven; antes que destruya
el tiempo aleve la gentil corona,
cuando la vida dice aún: «Soy tuya»,
aunque sepamos bien que nos traiciona.
Manuel Gutierrez Najera, "Para Entonces"
En la Guerra, el Destino de un Aviador Naval es incierto, la probabilidad de despegar del portaaviones y nunca regresar es muy alta, aun en tiempo de paz, los accidentes, el clima, el mar embrabecido, muchas cosas pueden salir mal, y es responsabilidad del piloto hacer las cosas correctamente, de tal forma que el vuelo sea seguro, y que puedas encontrar el camino de regreso a casa, pero en tiempo de guerra, los riesgos se multiplican, la posibilidad de regresar es poca.
En todo caso, habia que estar preparado, para morir en el mar, yo ya habia dejado instrucciones precisas, mi lapida debia decir:
Rest in Pieces
Descansa en Pez
Claro que con humor, ya de por si la muerte es tragica, pero no me iba a ir llorando, sino riendome, ya hay demasiada desgracia humana como para aumentarla, despues de todo moriria joven, la guerra parecia inminente en los ochentas y de plano habia pensado que no llegaria a viejo.
Pero nada paso, servi por años y me retire vivo, ahora son solo recuerdos, por otra parte esa forma de pensar tiene consecuencias, no me case, ni tuve hijos en la epoca que todos lo hacen, se me hacia cruel dejar una familia desprotegida, hijos sin padre y una viuda desamparada, tal era mi convencimiento de que no sobreviria a los veinte, pero ahora con cincuenta veo lo afortunado que fui, al no estar amarrado, pude hacer cosas solo para mi, viajar, viejar, estudiar lo que quisiera, es increible cuantas cosas se pueden hacer y lograr si no se esta atado a nada, ademas ahora comprendo a todos aquellos militares que o no se casaron o lo hicieron grandes.
Y ahora miro de nuevo al futuro, aun sigo deseando morir en la mar, perecer en mi cama, como que no va conmigo, cuando sea el momento oportuno, dentro de varias decadas, me gustaria salir, volar sobre un mar nocturno y nunca mas regresar, perderme en ese infinito, y claro, Descansar en Pez.
